El Poder de encontrar el ALMA

El Poder de encontrar el ALMA

By Jordí Duque / www.jordiduque.com

Según recientes proyecciones, cerca del 75% de la población mundial vivirá para el año 2050 en los centros urbanos y ciudades. Ese fue el dato estadístico que entregó Carolina Barco, directora de la Plataforma de Ciudades Emergentes y Sostenibles del Banco Interamericano de Desarrollo, en el Encuentro Internacional Cities For LIfe realizado en Medellín Colombia en agosto del 2015.

Hoy esta cifra alcanza el 50%, lo que implica repensar nuestras ciudades, más allá de la diversidad cultural, el tamaño o las condiciones actuales de los centros urbanos, también sugiere dar prioridad al desarrollo humano sostenible, la democracia, la inclusión, la equidad y la libertad en estas sociedades urbanas cada vez más complejas.

Una de las conclusiones más importantes y relevantes de este Encuentro fue “Debemos acompañar a encontrar el alma a las sociedades, por ende a las ciudades y a sus colectivos de habitantes”. ¿Qué lectura podría entenderse tras esta afirmación? Quizá que nuestras ciudades, nuestros paradigmas  urbanos están desdibujados de ese gran colectivo representacional que significa una sociedad unida, servicial y en convivencia desde la diversidad. Somos una cantidad de individualidades que creamos una masa crítica, con una vibración única, con una dinámica única, y al tiempo supremamente ensimismada.

La tarea sea cierta. Debemos unir nuestras acciones en pos de un colectivo potenciador y enriquecedor. Pero ¿Conocemos la esencia de esa creación? Desde mi observador. No. Un contundente No. Probablemente pocos sí. Lo cierto es que muchos, la inmensa mayoría, se han dedicado al gozo de la vida desde el ego, desde la codicia, desde los bienes materiales, y no  se han dado cuenta de la riqueza, de la inmensa riqueza que atesoramos como seres humanos.

Fíjese bien. Habitamos las 24 horas del día, los 365 días del año en un solo espacio. Es más toda la vida, la mía y la suya. La pasamos aquí. Si aquí adentro. En nuestro cuerpo. En nuestra experiencia de vida. Esa que se da aquí. En su espacio físico llamado cuerpo, en sus pensamientos, en sus emociones y su ser social, en su ser con dimensión espiritual, en todos sus dominios fundamentales. La vida material se da desde aquí. Desde su esencia como humano.

Quiero invitarlo a reflexionar en algo supremamente simple. Usted  habita en su cuerpo, allí siente, se emociona y experimenta estados de bienestar o malestar constantemente, de acuerdo con sus pensamientos y su contacto con el exterior. ¿Cuánto tiempo, cuántas acciones, conscientemente, le dedica al cuidado y bienestar de su cuerpo, su universo interno? Poco verdad. Casi siempre vivimos por vivir y hacemos por hacer, al igual que el 75% de la población mundial. Solo el 25% de los humanos vivimos como queremos vivir y casi siempre vivimos para atender el afuera o sea  a la sociedad, el trabajo, la defensa, la contrariedad, las posiciones sociales,  el dominio, el glamour, la etiqueta, etc.

Contrario a esto también tenemos nuestro universo, adentro de la piel. Nuestro mundo, dado por las experiencias internas vividas desde nuestra manera de mirar el mundo y nuestros códigos morales y éticos, nuestros paradigmas, nuestra genética y nuestra tradición. Toda esa experiencia es única y solo suya, o mia, eso es lo mágico. Ahí, adentro, existe también un componente del cual debemos hacernos cargo, es nuestra Alma, nuestro ser interior, entendida como una entidad abstracta tradicionalmente considerada la parte inmaterial que, junto con el cuerpo o parte material, constituye el ser humano y a la que también se le atribuye la capacidad de sentir y “pensar”. Es nuestra esencia. Nuestra vibración interior. Nuestro centro de bienestar y poder. A esa, frecuentemente, no la escuchamos. La ignoramos para darle paso al ego, como actividad mental que nos abruma y toma decisiones contantemente por nosotros, sin nuestra autorización. Es un juego sinuoso. Es nuestra realidad.

Crear, encontrar o identificar el alma de las sociedades, es pues, la tarea de aunar, cooperar, promover la creación de espacios donde nos reencontremos desde la humildad de lo que somos como seres, no desde el ego. No. Sino desde el reencuentro de serenidad y construcción colectiva. Desde la valoración del otro, por su esencia que es igual para todos, humana y con valores sociales diferentes según la región, el idioma y la cultura. Para esto debemos educar en desaprender los modelos egoístas, y volver a lo colectivo,  al disentimiento, pero con respeto, al disfrute de los espacios públicos en familia y con amigos; volver al picnic en parques, al juego pacífico y la diversión, y también escuchar el silencio. Debemos crear escenarios para la pacificación de corazones y humanos dolidos. Debemos conocer e indagar sobre la fuerza y las virtudes de nuestra Alma, que están ahí siempre y a las cuales podemos descender cada que queramos y abrazarlas. Paz, Amor, Pureza, Poder y Felicidad, nos esperan, permanentemente porque ya habitan en nosotros. Son parte de nuestra esencia. Pero también le esperan a las sociedades que decidan empoderarse para conectarse con su Alma.

Escuche su Alma, ella esta con usted. Es usted. Y muchas de ellas constituyen el Alma de su sociedad, nuestra sociedad.

¿Qué hará hoy para conectarse con la suya? Reconozca esa fuerza. Es inmensa.

Jordí Duque / www.jordiduque.com

Jordí Duque. Renombrado conferencista y Biocoach a internacional especialmente enfocado al Cambio Humano Profundo. Líder transformacional. Comunicador social, periodista de la Universidad Pontificia Bolivariana, con estudios en Artes Liberales de la Universidad de Navarra en España, además de Estudios en Geopolítica en París, Modelos de estructura del pensamiento en Australia. Conferencista en temas de Neuro-desarrollo organizacional, clima y cambio organizacional, habilidades gerenciales y liderazgo, gobierno personal y gerencia de sí mismo, desarrollo del pensamiento hacia el logro, protocolo personal y empresarial, escritor y columnista, facilitador de experiencias para el desarrollo del Ser, además Certificado a nivel internacional como Professional Biocoach por la International Biocoach Society, entre otros. Consultor en: Neuro-transformación organizacional, Comunicación Social, Estrategias de Opinión Pública y manejo de Públicos, Pensamiento Estratégico, Cambio y transformación Organizacional, Desarrollo de Habilidades Gerenciales, Biocoach, Manejo de Medios de Comunicación y Proyección de Marcas y Personas, Relaciones Públicas, Estrategias de comunicación y Persuasión, Manejo de Clima Laboral y posicionamiento de instituciones, marcas y regiones. Coaching Social y para la paz.

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